Vía que Allah indica a la humanidad para que cumpla su voluntad. Toma cuerpo en las regulaciones de la vida del musulmán que aparecen en el Corán y el modelo ético que se desprende de la vida de Mahoma a través de los hadices o de su biografía. Es ante todo una utopía. En El Corán no hay más de 90 aleyas referidas a cuestiones legales. Se puede afirmar que la sharía es de origen divino, pero, se trata de un constructo histórico que refleja un “intento” del ser humano por comprender y aplicar los designios divinos, con los preceptos coránicos. Se establece a partir de las Fuentes Islámicas: Corán, Hadiz, Ichmá. Estas tres Fuentes Islámicas forman el fiqh (Derecho Islámico).
El Corán recoge la Revelación hecha a Mahoma y la reparte sin orden de fecha en distintas shuras mediante las aleyas (capítulos y versículos). En el Libro contemplan un orden según la extensión de la shura, seguramente para facilitar la memorización tan valorada como inútil del Corán en su totalidad. Hadiz es la narración oral, charla, gesto y comportamiento de Mahoma. Ichmá es el consenso de los eruditos.
A causa de las tensiones entre las dos posturas surgidas tras el asesinato de Uzmán, 3er. Califa rachidí, se desencadena la llamada “gran fitna” disputa entre los descendientes de Mahoma (sunna) y los mequíes que apoyaron a la rama de la tribu quarichí. Es cuando surge el eterno enfrentamiento entre sí de los sistemas doctrinales más reconocidos en el mundo islamista, SUNÍES y CHIÍES.
Las lenguas habladas en la península Arábiga, que dieron lugar al árabe clásico, pertenecen al grupo semítico y se hablan desde el milenio III a.C. fácil resulta imaginarse que una escritura sin comas, acentos ni puntos diacríticos tan importantes en la ortografía árabe y junto a la carencia de vocales, la difícil interpretación que del Corán se podía hacer en el siglo VII. Existe una Escuela de Interpretación Coránica; una disciplina de la jurisprudencia islámica (fiqh) llamada nasj que se ocupa de la invalidación, modificación o eliminación de lo establecido en un pasaje del Corán por lo sostenido en otro. Todo ello se fundamenta en una aleya 2. (106). Existen tantas contradicciones que hacen del Corán un libro modificado, rectificado y orientado a la conveniencia humana más que al adoctrinamiento divino original.
En los Textus Receptus están contenidas palabras divinas y palabras humanas, (por ej.) las de Mahoma atacando a sus enemigos personales. También se hacen prevalecer sobre los Corpus Privados las versiones oficialistas destruyendo los manuscritos de las familias Ubbay, Alí, Ibn Masud, Abu-Musa_Al Asari. Empieza a distanciarse la corriente sunní de la chií.
Los Omeyas con política paciente van eliminando sin coacción todos los Curpus Privados. Introducen la notación de vocales a fin de evitar que los lectores, conscientes o no, desvirtúen el texto consonántico mediante alteraciones consonánticas. No olvidemos que el Corán es más cantado que leído. Es como cantar una canción y no saber la letra.
Todo esto nos sugiere lo manipulable que son en boca de los imanes en las mezquitas las shuras recitadas en la oración. Da mucho que pensar.
✍ Tomeu Pizá
Derecho, Economista, Profesor.
2 Comentarios
La verdad que nada fácil resulta entender tanta manipulación que a través de siglos se ha llevado a cabo en las madrasas, más fruto de la interpretación y conveniencia que de la mala fe.
ResponderEliminarLamentable que se pretenda hacer prevalecer una corriente sobre otras (suni o chií) cuando en el siglo VII el árabe no tenía signos diacríticos y se procedió a escribir al-quitab interpretando muy a su estilo, tanto los seguidores de la sunna como los de Alí. Actualmente ni siquiera toda una ESCUELA DE INTERPRETACIÓN CORÁNICA ha conseguido poner orden a este desaguiso en el seno el Islam.
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