Día Internacional de las Luchas Campesinas

                             

✍Día Internacional/ Una fecha para visibilizar la resistencia rural y la defensa de la tierra

Cada 17 de abril se conmemora el Día Internacional de las Luchas Campesinas, una jornada de memoria, denuncia y reivindicación de los derechos de quienes cultivan la tierra. La fecha fue establecida por la organización internacional La Vía Campesina en homenaje a los 19 campesinos sin tierra asesinados en 1996 en Eldorado do Carajás, Brasil, durante una protesta pacífica por el acceso a tierras para trabajar y vivir.

Este día no solo recuerda aquel trágico episodio, sino que visibiliza las múltiples luchas contemporáneas del campesinado a nivel mundial: el acceso justo a la tierra y al agua, la soberanía alimentaria, la resistencia frente a los desalojos forzosos, el impacto del agroextractivismo, el cambio climático, y las políticas que muchas veces marginan a los pequeños productores.

Los campesinos y campesinas son responsables de producir gran parte de los alimentos que consumimos, especialmente en zonas rurales y de bajos ingresos, y su rol es esencial para garantizar un sistema alimentario justo, local y sostenible. Sin embargo, millones de personas que viven del campo continúan enfrentando pobreza, violencia, falta de acceso a servicios básicos y políticas públicas que favorecen a grandes corporaciones agrícolas.

En muchos países de América Latina, África y Asia, el Día de las Luchas Campesinas se celebra con marchas, ferias agroecológicas, asambleas comunitarias, actividades educativas y movilizaciones simbólicas que recuerdan la importancia de proteger a quienes cuidan la tierra.

En el contexto actual de crisis climática y alimentaria global, el movimiento campesino plantea un modelo alternativo basado en la agroecología, el respeto a la diversidad cultural, la igualdad de género en el campo y la protección de los bienes comunes.

Este 17 de abril es una oportunidad para mirar hacia el campo no solo con memoria, sino también con esperanza y compromiso: por el derecho a sembrar, a vivir dignamente de la tierra, y a construir un futuro rural más justo y sostenible.