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La estrecha diferencia refleja una profunda división entre el bloque proeuropeo y los sectores ultraconservadores
Los sondeos a pie de urna realizados este domingo tras el cierre de los colegios electorales en Polonia indican una victoria muy ajustada del candidato europeísta, respaldado por la coalición centrista que promueve un mayor alineamiento con la Unión Europea, frente al aspirante del partido ultraconservador Ley y Justicia (PiS).
Según los datos preliminares, el candidato proeuropeo habría obtenido en torno al 50,4% de los votos, apenas unas décimas por encima de su rival, en unos comicios marcados por una alta participación y un clima de fuerte polarización política.
Esta leve ventaja podría no ser definitiva hasta el recuento oficial, por lo que ambas formaciones han optado por la cautela. Mientras desde el bloque europeísta se habla ya de “cambio de rumbo”, en el PiS aseguran que esperarán al escrutinio completo y no descartan impugnar algunos resultados si se detectan irregularidades.
La campaña ha estado centrada en temas como el respeto al Estado de derecho, la independencia judicial, el papel de Polonia en la UE y las políticas migratorias, con el bloque europeísta prometiendo reconstruir los puentes con Bruselas, mientras que los ultraconservadores insistían en mantener una política soberanista y contraria a las imposiciones comunitarias.
De confirmarse el resultado, supondría un importante giro político en el país, tras años de tensiones entre Varsovia y las instituciones europeas por vulneraciones del Estado de derecho, medios de comunicación y derechos civiles.








