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Menopausia sin tabúes: cómo la dieta influye en los sofocos (IV)

✍️ Silvia Pérez — Subdirectora, sanitaria, terapeuta de animales y especialista en dietética y nutrición/

Cuarta entrega 

En entrega anterior, hablamos de los sofocos, uno de los síntomas más comunes (y, a veces, más molestos) de la menopausia. Descubrimos por qué se producen, a quién afectan, cuánto pueden durar y, sobre todo, cómo aliviarlos con herramientas naturales, alimentación adecuada y algunos trucos prácticos para el día a día.

Hoy seguimos avanzando. Porque cada síntoma que comprendemos nos permite vivir esta etapa con más claridad, cuidado y conciencia.

Alimentación y sofocos: lo que comes puede marcar la diferencia

Si estás atravesando la menopausia y convives con sofocos frecuentes, es posible que ya hayas probado de todo: abanicos, infusiones, ropa fresca, trucos para dormir...
Pero hay algo que muchas veces pasamos por alto: la relación entre lo que comemos y cómo se comportan los sofocos.

Sí, tu alimentación puede ser una gran aliada... o todo lo contrario.

¿Por qué lo que comemos influye en los sofocos?

Cuando los niveles de estrógenos bajan, el cuerpo se vuelve más sensible a los cambios: temperatura, emociones, y también a lo que ingerimos.
Algunos alimentos estimulan el sistema nervioso o elevan la temperatura corporal, lo que activa o intensifica los sofocos.
Otros, en cambio, ayudan a regular las hormonas de forma natural, refrescan, calman y aportan equilibrio.

Alimentos que ayudan a reducir sofocos

Estos alimentos tienen un efecto regulador, antiinflamatorio o refrescante.
Incluirlos en tu día a día puede marcar la diferencia:

.   Soja natural (tofu, edamame, tempeh)
Contiene fitoestrógenos (isoflavonas), compuestos vegetales que actúan de forma parecida a los estrógenos humanos.

.   Semillas de lino y chía
Regulan hormonas, mejoran la digestión y ayudan a estabilizar el sistema endocrino.

.   Verduras de hoja verde (espinacas, rúcula, acelgas)
Aportan magnesio, calcio y antioxidantes que calman el sistema nervioso.

.   Frutas ricas en agua (papaya, melón, sandía, pera)
Hidratantes y depurativas, ayudan a mantener la temperatura corporal más estable.

.   Grasas saludables (aguacate, frutos secos crudos, aceite de oliva virgen extra)
Mejoran la función hormonal y reducen la inflamación general.

.   Legumbres y cereales integrales
Ricos en fibra y micronutrientes, equilibran el azúcar en sangre y evitan picos de calor.

Alimentos que pueden empeorar los sofocos

Sin saberlo, a veces estamos comiendo cosas que activan el “termostato interno” y lo alteran. Estos son algunos de los más comunes:

.   Alcohol
Dilata los vasos sanguíneos y provoca sensación de calor.

.   Café o bebidas con cafeína
Estimulan el sistema nervioso y pueden activar sofocos, sobre todo si se toman en ayunas o por la tarde.

.   Comidas picantes
Suben la temperatura corporal y pueden desencadenar un sofoco inmediatamente.

.   Azúcar refinado y harinas blancas
Alteran el equilibrio hormonal y generan inflamación, que empeora muchos síntomas.

.   Bebidas muy calientes
Aunque sea una infusión saludable, si la tomas hirviendo puede desencadenar una subida brusca de temperatura.

Consejos prácticos para el día a día

.   Evita los ayunos prolongados: el cuerpo reacciona con más intensidad a los cambios bruscos
.   Come despacio y sin calor: el entorno donde comes también importa
.   Hidrátate durante el día: no solo con agua, también con caldos suaves, infusiones frías, frutas y verduras
.   Incluye pequeñas porciones de fitoestrógenos a diario: no hace falta abusar, pero sí mantener una constancia

Recuerda:

Lo que comes no va a eliminar los sofocos de un día para otro, pero sí puede ayudarte a reducir su intensidad, frecuencia y duración.
La clave está en la regularidad y en observar cómo reacciona tu cuerpo.
Cada mujer es distinta. Lo importante es que te escuches, pruebes y ajustes tu alimentación con cariño y sin obsesión.

💛Te espero en la próxima entrega, donde seguiremos profundizando en cada uno de los síntomas que nos puede ocasionar la menopausia, para entenderlos mejor, afrontarlos con más calma y descubrir formas reales de cuidarnos en esta etapa.  

Si no te quieres perder ninguna publicación, pincha aquí👉 Menopausia sin Tabúes, porque la menopausia... nunca debió de ser un tabú.

Importante: si estás tomando medicación o tienes alguna condición de salud, es recomendable consultar antes con un profesional.