De “remedio” para el estómago a salsa universal
- En la década de 1830, en EE. UU., se popularizó el ketchup de tomate como “medicina” para la indigestión y la diarrea.
- Algunos vendedores llegaron a comercializar “píldoras de tomate” y jarabes en boticas.
- Con el tiempo, las curas milagro fueron desacreditadas y el ketchup pasó a la cocina.
- A finales del siglo XIX, Heinz estandarizó la receta con vinagre, azúcar y especias, y la convirtió en un condimento masivo.
Curiosidad histórica: El ketchup original, mucho antes de llevar tomate, nació en Asia como "kê-tsiap", una salsa fermentada hecha con jugo de pescado, especias y sal. Los británicos la llevaron a Europa, donde la adaptaron con setas, nueces o anchoas, y siglos después en EE. UU. evolucionó hasta la versión de tomate que hoy conocemos.







