✍️ Staly Concha, Agente de Prensa, Periodista, Coach de estilo e imagen personal/
Vestir adecuadamente: una forma silenciosa de elevar la autoestima
Según últimos estudios científicos la frase “el hábito no hace al monje”, se ha convertido en ambivalente ya que la Vestimenta es una forma de comunicación, no verbal, además en una sociedad en constante transformación resulta influyente para la marca personal y percepción externa e interna de empoderamiento.
Porque aunque la esencia de una persona esté dentro, lo cierto es que la imagen exterior puede potenciar —o apagar— esa luz interior que todos llevamos.
Vestir adecuadamente no es un acto superficial, sino una forma cotidiana de fortalecer la autoestima y proyectar seguridad.
En un mundo que se mueve rápidamente , donde la comodidad suele imponerse a la elegancia, muchas personas no conocen el poder transformador de la ropa o los accesorios, Sin embargo, la psicología del vestir demuestra que los colores, las texturas y hasta los accesorios que elegimos influyen directamente en nuestras emociones y en la forma en que nos relacionamos con los demás.
Cuando una persona se siente bien con su aspecto, se comporta diferente: camina con más firmeza, sonríe más y transmite una energía positiva que los demás perciben.
Vestir bien no significa gastar mucho. Significa conocerse. Saber qué te favorece, qué te representa y qué te hace sentir cómodo y auténtico. La ropa puede ser una herramienta de comunicación silenciosa: sin decir una palabra, revela cómo te sientes y cómo quieres ser percibido.
Y en ese equilibrio entre comodidad, coherencia y estilo, nace la verdadera elegancia: aquella que no impone, sino que inspira.
Generalmente, los grandes cambios personales empiezan frente al espejo. Quien atraviesa una crisis, una ruptura o simplemente decide empezar de nuevo, a menudo lo hace con un cambio de look. Porque vestirse diferente también es una forma de decir: “aquí estoy, más fuerte que antes”.
Por eso, vestir adecuadamente no es una frivolidad, es una forma de respeto hacia uno mismo. Es reconocer que lo exterior también comunica, y que cuidar la imagen es cuidar la autoestima.
Porque, al final, el hábito quizá no haga completamente al monje… pero la historia nos muestra desde Charles Chaplin hasta Marilyn Monroe que ayuda a recordar quién es.
#PsicologíaDelVestir #AutoestimaFemenina #EstiloConPropósito #ImagenPersonal #AmorPropio #MotivaciónDiaria #ModaConSentido #ConfianzaInterior #EmpoderamientoFemenino








