-->
Sígueme en Facebook  Sígueme en Twitter Sígueme en YouTube Sígueme en Instagram Sígueme en Telegram Sígueme en TikTok

 


Millones de niños en Sudán del Sur están al borde del hambre y la desnutrición por el recrudecimiento del conflicto


 Unicef/

Más de 7,5 millones de personas, entre ellas 2,1 millones de niños y niñas, podrían pasar hambre extrema durante la próxima temporada de escasez

Las Naciones Unidas han advertido de que Sudán del Sur sigue enfrentándose a una grave crisis alimentaria y nutricional que amenaza con empeorar si no se emprenden acciones humanitarias urgentes.

El último informe de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (IPC), publicado hoy, prevé que más de la mitad de la población —aproximadamente 7,56 millones de personas— se enfrentará a una crisis o a niveles aún peores de hambre durante la temporada de escasez de 2026, de abril a julio. En este mismo periodo, se prevé que más de 2 millones de niños y niñas sufrirán desnutrición aguda.

La inseguridad alimentaria está muy extendida y se agrava en varias zonas del país. La situación más preocupante es la de unas 28.000 personas que viven en los condados de Luakpiny/Nasir y Fangak, y que se enfrentan a niveles de hambre catastróficos (Fase 5 del IPC). Las zonas meridionales del condado de Luakpiny/Nasir corren riesgo de hambruna en el escenario más pesimista, en el que persisten los conflictos y las restricciones de acceso, además de las inundaciones y los brotes de enfermedades.

Los altos niveles de hambre siguen impulsados por diversos factores, entre ellos la intensificación del conflicto, los desplazamientos masivos, las limitaciones de acceso, la crisis económica, los fenómenos climáticos extremos y la pérdida de capacidad de resistencia. En conjunto, estos elementos conforman una compleja red de vulnerabilidad. En cambio, la seguridad alimentaria ha mejorado ligeramente en los condados donde se mantiene la paz.

“El hambre que estamos presenciando en Sudán del Sur se debe en parte a las temporadas agrícolas interrumpidas y a los sistemas agroalimentarios que no alcanzan a cubrir las necesidades del país”, ha afirmado Meshack Malo, representante de la FAO en Sudán del Sur. “Lograr una paz duradera y revitalizar los sistemas agroalimentarios es esencial para poner fin al hambre. Cuando se cultivan los campos y se restablecen los mercados, las familias recuperan su dignidad”.

El acceso humanitario sigue siendo uno de los mayores retos. En muchas zonas del país, la inseguridad, los saqueos, el mal estado de las carreteras y las inundaciones han dejado a comunidades enteras aisladas durante meses. Esta situación impide que la ayuda vital llegue a quienes más la necesitan y agrava su vulnerabilidad.

“Esta es una trayectoria alarmante”, ha afirmado Mary-Ellen McGroarty, directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en Sudán del Sur. “Los persistentes niveles de hambre siguen siendo profundamente preocupantes. En los condados donde se ha mantenido la paz, y los actores humanitarios han contado con acceso y recursos, la población ha dado los primeros pasos hacia la recuperación. Aunque este avance es alentador, es crucial mantener el impulso para garantizar un cambio positivo y duradero en todas las comunidades afectadas”.

Se prevé que seis condados sin antecedentes alcancen niveles críticos de desnutrición aguda en 2026, principalmente debido al desplazamiento causado por el conflicto y al acceso limitado a alimentos, servicios de nutrición, agua y salud, agravado por un brote de cólera en expansión. En total, 2,1 millones de niños menores de cinco años y 1,1 millones de madres corren riesgo de desnutrición aguda para junio de 2026.

“Este análisis muestra una situación muy preocupante, con niveles persistentemente altos de desnutrición grave entre los niños más pequeños. Estos niños y niñas no son responsables de los factores que han provocado el desplazamiento y el cierre de los centros de nutrición. Garantizar un acceso seguro y la continuidad de los servicios vitales de salud y nutrición en todas las zonas afectadas es urgente y esencial”, ha afirmado la representante de UNICEF en el país, Noala Skinner.

Mientras subrayan la necesidad urgente de un acceso humanitario sin obstáculos en Sudán del Sur, las agencias humanitarias advierten que la ventana de acción se está cerrando rápidamente y que el momento de actuar es ahora. Es esencial un apoyo urgente y sostenido para salvar vidas, proteger los medios de subsistencia y evitar que la situación derive en una crisis humanitaria aún más profunda.