Una hora pensada para sonreír
Puede que nunca te hayas fijado… pero la próxima vez que veas un anuncio de relojes, notarás que casi todos marcan la misma hora: las 10:10. No es casualidad.
Esa posición de las agujas se utiliza porque forma una “sonrisa visual”, creando una sensación de equilibrio y armonía. Las agujas abiertas en esa forma destacan el logotipo de la marca (que suele estar en la parte superior del reloj), y transmiten una imagen positiva, como si el reloj “sonriera”.
Además, esta disposición deja visibles los elementos importantes de la esfera —fecha, cronómetros o nombre del fabricante— sin que las agujas los tapen. En resumen, es una estrategia estética y emocional al mismo tiempo: los relojes felices venden más.
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