✍Redacción/Las trabajadoras denuncian desigualdad salarial, vulneración de derechos y la “irresponsabilidad” del Ayuntamiento
Las trabajadoras de las escoletes externalizadas de Palma afrontan su segundo día de huelga indefinida con un seguimiento del 100%, pese a los servicios mínimos "abusivos" impuestos por el Ayuntamiento.
Así lo han manifestado las federaciones de enseñanza de UGT y CCOO en un comunicado conjunto, en el que califican el primer día de movilización como un "auténtico éxito". Según los sindicatos, Cort ha impuesto unos servicios mínimos que afectan al 92% de las plantillas, superando ampliamente los establecidos en huelgas anteriores del sector.
Entre los ejemplos de esta “vulneración de derechos fundamentales”, señalan que algunas cocineras solo han podido ejercer su derecho a huelga durante una hora al día, a pesar de tener que realizar las mismas tareas en menos tiempo.
Ante esta situación, ambos sindicatos han interpuesto una demanda judicial contra el Ayuntamiento de Palma por lo que consideran una “grave actuación” desde el punto de vista legal y político.
El motivo principal de la huelga es denunciar la discriminación salarial entre las escoletes gestionadas directamente por el Consistorio y aquellas externalizadas. Las trabajadoras de estos últimos centros aseguran tener la misma formación, funciones y responsabilidades, pero cobrar hasta 700 euros menos al mes.
"¿Quiere el Ayuntamiento empezar a trabajar hacia la equiparación salarial o prefiere seguir sin hacer nada?", se preguntan los sindicatos. A su juicio, hasta ahora solo han recibido “mentiras, evasivas, menosprecio institucional y vulneración de derechos fundamentales”.
De los 12 centros públicos del Patronato Municipal de Escuelas Infantiles (PMEI), ocho están gestionados de forma indirecta por la empresa Estudi 6. Los sindicatos critican que Cort se “desentiende completamente” de estas trabajadoras, así como de los alumnos y sus familias, lo que consideran una “irresponsabilidad absoluta”.
"Si solo se responsabilizan de tres centros, sus salarios también deberían ser proporcionales", subrayan desde UGT y CCOO, acusando al Ayuntamiento de falta de liderazgo y compromiso institucional con un servicio clave para la ciudad.
Las organizaciones sindicales también han destacado el apoyo de más de 400 familias, que han mostrado su respaldo mediante recogidas de firmas, declaraciones públicas y acciones de acompañamiento. Todas ellas exigen que las educadoras tengan condiciones laborales dignas y sean tratadas con respeto y justicia.
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