(Queda menos de un mes para que se cumplan 89 años, de este asesinato tan sangriento y cruel, un recuerdo vivo de las atrocidades que siempre traen las guerras)
En el tranquilo pueblo navarro de Lezáun, en 1867, nació Apolonia Lizárraga y Ochoa de Zabalegui. Entró joven en la congregación de las Carmelitas de la Caridad y, tras décadas de entrega silenciosa, llegó a ser Superiora General en 1925. Durante once años dirigió a sus hermanas con firmeza y ternura, afrontando incluso las tensiones políticas y sociales que poco a poco se cernían sobre España.
El estallido de la Guerra Civil en 1936 trajo una ola de persecución religiosa. En Barcelona, Sor Apolonia se ocupó de proteger a novicias, enfermas y ancianas, organizando su dispersión para evitarles el peligro. No quiso huir para salvarse; prefirió quedarse para animar y proteger a quien lo necesitara.
El 8 de septiembre de 1936, fue arrestada y llevada a la checa de San Elías, un antiguo convento reconvertido en prisión y centro de torturas, bajo control de milicianos vinculados a la CNT-FAI y ERC, según relatan las crónicas eclesiásticas y recogió el propio Vaticano en el proceso de beatificación.
En la checa, Sor Apolonia sufrió vejaciones y humillaciones. Testimonios de la época narran que fue desnudada, colgada de un gancho y aserrada viva. Sus restos, según estos relatos, fueron arrojados a los cerdos; los animales, alimentados con su carne, fueron luego sacrificados y su carne vendida bajo el macabro nombre de “chorizos de monja”.
Este martirio no fue fruto de un arrebato aislado, sino parte de una violencia sistemática contra religiosos y religiosas en Cataluña durante aquel período. La fortaleza espiritual de Sor Apolonia, que aceptó su destino sin renegar de su fe, la convirtió en símbolo de fidelidad hasta el final.
El 28 de octubre de 2007, el papa Benedicto XVI la proclamó beata, reconociendo su martirio “por odio a la fe” junto a otros 497 mártires del siglo XX en España. Hoy, su memoria permanece viva como testimonio de valor, caridad y perdón incluso frente a la crueldad más extrema.
![]() |








